España está en shock tras la desastrosa inundación que azotó la Comunidad Valenciana provocando al menos 95 muertos. Desgraciadamente, el número de víctimas es provisional, mientras continúan las operaciones de búsqueda de los numerosos desaparecidos con la esperanza de encontrar supervivientes. Alrededor de un millar de soldados están desplegados en el lugar, junto con bomberos, policías y socorristas, trabajando para localizar a posibles supervivientes y limpiar las zonas afectadas por la catástrofe.
El último balance oficial comunicado por las autoridades habla de 95 fallecidos, de los cuales 92 en la Comunidad Valenciana, la más afectada. Se registraron dos muertes más en la vecina región de Castilla-La Mancha y una tercera en Andalucía. Este es el número de víctimas más grave desde la inundación de 1973: 300 personas murieron entoncesPero esta vez también el número está destinado a aumentar debido a los numerosos desaparecidos (aunque no hay una estimación precisa), advirtió el ministro de Políticas Territoriales, Ángel Víctor Torres.
El presidente del Gobierno, Pedro Sànchez, que ha declarado tres días de luto nacional, estará esta mañana en Valencia, donde visitará el Centro de Coordinación de Ayuda (Cecopi). Ayer en un breve discurso televisado el líder socialista aseguró que el Gobierno no dejará «solas» a las víctimas. Según los servicios de emergencia, Miles de personas seguían esta mañana sin luz en la Comunidad Valenciana; Muchas carreteras permanecen cerradas e innumerables coches destrozados están esparcidos por todas partes, cubiertos de barro y escombros, bloqueando los paso.
Según las autoridades, uno de los lugares más afectados fue Paiporta, en la periferia sur de Valencia, donde murieron unas cuarenta personas, entre ellas una madre y su bebé de tres meses, arrastradas por la corriente. El presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Manzón, afirmó anoche que los servicios de emergencia realizaron «200 operaciones de salvamento terrestre y 70 operaciones de rescate aéreo» con helicópteros durante la jornada. Precisó también que los servicios de emergencia lograron llegar a todas las zonas afectadas, mientras que varios pueblos permanecieron aislados del resto del país durante gran parte de ayer.
Según la agencia meteorológica Aemet, en la noche del martes al miércoles cayeron más de 300 litros de agua por metro cuadrado en varias localidades de la Comunidad Valenciana, con un pico de 491 litros en el pequeño pueblo de Chiva: el equivalente a “Un año de precipitaciones”, dijo.
La prensa española, que definió lo sucedido como «la inundación del siglo», cuestiona en sus comentarios la rapidez de reacción de las autoridades: el mensaje de alerta de Protección Civil a los vecinos se envió pasadas las 20 horas del martes en la Comunidad Valenciana y en general. en la costa mediterránea española, el fenómeno conocido como «gota fría» o Dana, una depresión aislada a gran altura que provoca lluvias repentinas y muy violentas, a veces durante varios días. Su violencia se ve ahora incrementada por las consecuencias del calentamiento global, señalaron los expertos.