«El resultado del referéndum para la creación de la ciudad única de Cosenza, Rende y Castrolibero ha sancionado la victoria del NO, y con ello el cierre de una puerta hacia una oportunidad que tal vez nunca vuelva a surgir. No ha sido una simple votación administrativa, sino una elección que podría haber cambiado el futuro de nuestro territorio, garantizando más recursos, mejores servicios y un mayor atractivo para los jóvenes y para quienes viven aquí».
Así comenta Mario Occhiuto, el ex alcalde de Cosenza que fue uno de los impulsores del proyecto de ley..
«Quienes celebran hoy la victoria del NO – continúa Occhiuto – deben asumir la responsabilidad de haber bloqueado un proyecto que pretendía superar el provincianismo y construir una zona urbana fuerte, unida y competitiva. Las divisiones nunca han traído desarrollo y este territorio seguirá pagando el precio de fronteras administrativas que ya no reflejan la realidad. de una comunidad que ya vive como una sola ciudad».
«No quiero negar la legitimidad de la opción democrática – añade – pero debemos reflexionar sobre el hecho de que no fueron las ideas de futuro las que prevalecieron, sino los miedos, la desinformación y los intereses particulares. El NO no propuso una visión alternativa: se limitó a decir ‘no’ al cambio, dejando la zona en un punto muerto que no es bueno para nadie.»
«A quienes hoy se sienten satisfechos, les pregunto: ¿cuáles son sus planes para mejorar la calidad de vida de todos? ¿Qué propuestas tienen para garantizar a los jóvenes un futuro aquí, sin tener que irse? Es fácil detener un cambio, pero es mucho más difícil construir algo nuevo», concluye el ex alcalde, que ya mira hacia el futuro.
«Por lo que a mí respecta, seguiré creyendo que unir fuerzas es la única manera de garantizar un futuro mejor para nuestro territorio. La visión de una ciudad única no muere con este referéndum, porque la necesidad de unidad, desarrollo y el progreso sigue más vivo que nunca. El tiempo dirá quién trabajó realmente por el bien común».