Un canto al deporte y a aquellas empresas que han contribuido a escribir la historia del fútbol. Una ovación del tamaño de un estadio recibió al campeón de la Juventus de los años 1980. Michel Platini, invitado especial de Club Juventus «Gaetano Scirea» con motivo del 40 aniversario de su fundación. Feliz por el calor recibido, Platini se abrió al público con gracia e ironía, durante la rueda de prensa ofrecida por Monica Bertini, periodista deportiva y presentadora de televisión, junto a Guido Vaciago, director de Tuttosport, y Salvatore Giglio, fotógrafo oficial de la Juventus desde entonces. 1974. El evento fue organizado por el Club Luciese, presidido por Benedetto Merulla, quien no pudo contener la emoción de tener a Platini a su lado. Un regalo para los cientos de aficionados que invadieron el estadio. Los saludos estuvieron a cargo del alcalde de Santa Lucia del Mela, Matteo Sciotto.
El rey del fútbol de los años 80 recordó su profundo vínculo tanto con Gaetano Scirea como con Paolo Rossi y subrayó varias veces que cada jugador es único. Por tanto, no es necesario hacer clasificaciones, también porque, recordando a Maradona, no hay desafíos entre los futbolistas, pero quienes hacen este trabajo intentan dar alegría a sus aficionados. Esa misma alegría que supo transmitir Michel Platini, ganando todo lo que había que ganar con la camiseta de la Juve. Cuando se le preguntó cuál fue el mejor gol marcado, respondió el del Pescara. «Fue mi primer partido. No fue el mejor, pero sí el más importante porque cuando llegas a un club que tiene expectativas, tienes que demostrar que eres capaz». La velada llena de momentos finalizó con la proyección de un vídeo dedicado a los 40 años de historia del Juventus Club de Santa Lucía del Mela, recordando al fallecido Sergio Burrascano, entre sus socios fundadores. «Me conmueve tanto cariño aquí, Italia es la tierra de mis abuelos – dijo Platini -. En la Juventus encontré gente extraordinaria. De Agnelli a Trapattoni. Haber vestido la camiseta número 10 no fue una carga, sino un placer. El problema del fútbol no es que tengamos que encontrar uno más fuerte que el otro. Todos somos diferentes».