El fin ha llegado. El centro seguirá prestando servicios y seguirá siendo un valioso punto de referencia para el cuidado de las personas mayores. Don Orione está a salvo, el regalo debajo del árbol llegó para la comunidad y no solo para los invitados y trabajadores. Se ha evitado definitivamente el riesgo de cierre, ha madurado el acuerdo con una nueva empresa que se hará cargo de las actividades. Un punto de encuentro que varias veces en los últimos meses parecía haberse desvanecido. Un conflicto que había generado una postura fuerte por parte de los interlocutores sociales y de las familias de los huéspedes desesperados ante la posibilidad de un cierre en una zona con servicios deficientes, especialmente para los grupos vulnerables.
Pero el riesgo fue evitado, la negociación en el Palacio de Gobierno territorial cerró con resultado positivo tanto para los 24 invitados de la estructura como para los 18 trabajadores. El conflicto llevado a cabo conjuntamente por las secretarías de servicios públicos de la CGIL y la CISL se cerró con resultado positivo.