Cada vez es más concreta la hipótesis de que los fragmentos óseos presentes en el todoterreno destruido por un incendio encontrado por la policía el 18 de noviembre en una zona rural entre San Luca y Bovalino pertenecen al criador. Antonio Strangio, 42 años, desaparecido desde hace algunas semanas. La hipótesis encuentra aún más fundamento cuando se comprobó que los restos encontrados en el todoterreno de Strangio son de naturaleza humana y no animal, como se había planteado inicialmente.
Strangio, casado y padre de cuatro hijos, no tiene precedentes en los crímenes de la ‘Ndrangheta. Para determinar definitivamente si los restos pertenecen al agricultor, la Fiscalía de Locri ha ordenado su traslado a un centro sanitario especializado en Messina. Es en esta estructura donde los fragmentos óseos serán examinados y sometidos a análisis técnicos, incluida una tomografía computarizada. Posteriormente, luego de que la Fiscalía de Locri dé luz verde, también se realizará la prueba de ADN.